La Montaña Mágica

Jbel Toubkal, techo de Marruecos (4167 m)

     Hace unos años, ascendí con unos amigos el techo de Marruecos, el Jbel Toubkal (4167 m). No es poca cosa, aunque para los montañeros profesionales más avezados, no deja de ser un ascenso amateur. Aún así, para un neofito como yo, la sensación de alta montaña, con mis crampones y piolet, fue total. No menos impactantes fueron las emociones experimentadas en al cumbre. Una completa, total y absoluta sensación de alegría y felicidad. Desde ese momento he buscado sensaciones parecidas en nuestros picos más emblemáticos. Aquí en el Sur, el Mulhacén y el Veleta, en el Parque Nacional de Sierra Nevada y hace unas semanas el Monte Perdido en el Parque Nacional de Ordesa y el Aneto, el techo de los Pirineos, en el Parque Nacional de Posets-Maladeta. El primero lo ascendimos con éxito, sin embargo, el segundo, nos derrotó, debido a pasos con placas de hielo, a pesar de llevar crampones. No en vano, la gente se mata intentando ascender estos picos y aún así, parecen totalmente ridículos al lado de los ocho miles que vemos, ascienden los profesionales, por la tele.

Parque Nacional de Sierra Nevada

     El título de la bellísima novela de Thomas Mann me venía que ni pintado para intentar expresar las sensaciones que transmite la montaña. Magia, pura magia. Al principio era reacio a todo este mundo, ¿qué era eso de madrugar un fin de semana para ponerse a andar por el campo? "Hay que ser subnormal", pensaba para mis adentros. Pues heme aquí, subnormal profundo.

Thomas Mann escuchando a The Caretaker

     La montaña te atrae, existe un magnetismo inextricable e inexplicabe, pura magia, que te atrae hacia ella. Especialmente cuando se trata de hacer cima la sensación es muy difícil de definir. Aún así, el reciente fracaso pirenaico, me hace tener que decidirme entre senderismo o montañismo, sobre todo a raíz de la triste noticia de la muerte de nueve montañeros - entre ellos, tres guías profesionales - intentando ascender al mítico Mont Blanc.

Mont Blanc y valle de Chamounix

     Thomas Mann publicó "La Montaña Mágica" en 1924. El libro refleja a la perfección toda la belleza que me sugieren esos años. Un joven burgués de vida disipada y despreocupada, que es "atrapado" por la belleza de las montañas en un sanatorio de los Alpes suizos. Es realmente difícil hablar de una película o libro, sin intentar contar nada de su contenido. Yo personalemente, odio que me destripen no ya el final, sino incluso la más mínima parte de su argumento.

Caspar David Friedrich - Der Watzmann - 1824-1825

     En el cine la montaña ha sido tratada con desigual fortuna y siempre como marco secundario, como telón de fondo sin la mayor importancia, probablemente se deba a la dificultad real de rodar en ella. Eso fue así durante la práctica totalidad de la Historia del Cine, excepto en un período de tiempo y género muy concretos: el bergfilm alemán de los años 20. Bergfilm significa "cine de montaña", y la montaña, los Alpes, han estado muy presentes en la cultura germana. Estamos hablando, con todo lo que ello implica culturalmente, de la República de Weimar.

     El primer gran director de Bergfilms fue Arnold Fanck, doctor en geología y gran aficionado al montañismo y al esquí. La primera gran estrella de este género cinematográfico no sería otra que Leni Riefenstahl, la gran directora del III Reich alemán. El primer bergfilm que realizaron juntos fue "Die Heilige Berg" (La Montaña Sagrada, 1926). Fue seguido de "Die weiße Hölle vom Piz Palü" (El infierno blanco de Piz Palu, 1929) o "Stürme über dem Montblanc" (Tormenta sobre el Mont Blanc, 1930).

     El ascenso al poder de Adolf Hitler en 1933 acabaría con esta productiva unión. El doctor Fanck tendría problemas con Goebbels por negarse a afiliarse al partido nazi y por relacionarse con los judíos. Fanck caería en desgracia y caería en el más completo y absoluto olvido cinematográfico. No ocurriría lo mismo con Riefenstahl.

     Su vida es digna de un gran producción de Hollywood. Tras protagonizar los bergfilms, se pasaría a la dirección con "Das Blaue Licht" (La luz azul, 1932) premiada en Venecia y que gustó tanto a Hitler que le ofreció filmar la concentración del Partido Nazi en el Campo Zeppelín de Núremberg en 1933. El resto ya es Historia e Historia del Cine: "Der Sieg des Glaubens" (Victoria de fe, 1933),  "Triumph des Willens" (El triunfo de la voluntad, 1934) y "Tag der Freiheit: Unsere Wehrmacht" (Día de libertad: nuestras Fuerzas Armadas, 1935). Posteriormente, el macrodocumental sobre los Juegos Olímipicos de 1936, "Olympia", los juegos de los nazis y Hitler.

     Evidentemente sobre estos filmes pesan la propaganda y apología del nazismo, sin embargo, desde el punto de vista técnico, sus avances, supusieron un prodigio así como las técnicas de post-producción. A Riefenstahl, la persiguieron tras la Guerra, sobre todo los franceses, por sus vínculos con el nazismo, estigma del que nunca se pudo librar (se le acusó de ser amante de Hitler, hecho que ella negó siempre). Condenamos el nazismo, pero la obra de Riefenstahl es única. Ésto, ya no lo discute nadie hoy en día.

     Continuó su vida como fotografa, donde realizó trabajos tan bellos como los realizados en el cine. Destaca sobre todo sus fotos de África, sobre todo en Sudán, con el pueblo de los nubas. No en vano, su obra está editada por Taschen y Blumen. Moriría en 2003 con 101 años de edad. Lo dicho, una vida digna de una película.

     Tras ellos el relevo en el Bergfilme, lo recogió Luis Trenker (1882-1990). Nacido en el Imperio Austro-Húngaro, en el Tirol italiano aunque de habla germana, era un gran aficionado al montañismo. Empezó asesorando sobre aspectos técnicos de montañismo a Fanck, y debido a los constantes ataques de pánico del protagonista de "La Montaña Sagrada", acabó sustituyéndolo en las escenas más peligrosas. De ahí pasó a escribir, dirigir y protagonizar sus propias pelis, de entre las que destacan: Berge in flammen (Montañas en llamas, 1931) que está basada en la novela que él mismo escribió narrando sus aventuras como soldado en una unidad de montaña en los Alpes y Der Berg Ruft (La llamada de la montaña), de 1938, acerca de la rivalidad entre Whymper y Carrel por conseguir la primera ascensión al Cervino en 1865 y que desembocó en uno de los mayores dramas de la historia del alpinismo.

     Por último me gustaría destacar los documentales de Werner Herzog, como La Montaña Luminosa ("Gasherbrum", 1985). retrato del montañero Reinhold Messner que, en 1984, encaró la ascensión de los dos picos Gasherbrum en el Karakórum. En un viaje sin precedentes, Messner realizó, en compañía de Hans Kammerlander, una ascensión de siete días sin oxígeno ni material especializado.

Herzog & Messner

      “Está película nace de una serie de preguntas que me estaba planteando a mí mismo. ¿Por qué sentía Messner – un hombre que había perdido a su hermano en una expedición – la necesidad de escalar el Nanga Parbat una segunda vez? ¿Qué motiva a un hombre así? Una vez le pregunté si no pensaba que estaba un poco loco por seguir escalando montañas. ‘Toda la gente creativa está un poco loca’, me dijo” (Werner Herzog).

    


     Para finalizar algo de música, con el nuevo trabajo de Mount Eerie, "Clear Moon" (2012). Mount Eerie, es el nuevo alias que utiliza  Phil Elverum,  que utilizó para titular su último disco como The Microphones, nombre con el que ha dejado de grabar.

Mount Eerie

     Y un video de mis cabrones preferidos, no, no insulto, si se llaman The Mountain Goats, las cabras de montaña y son tíos, digo yo que serán...

The Mountain Goats

     Mi canción preferida de ellos es una versión de los Trembling Blue Stars "Sometimes I still Feel the Bruise". Con la de canciones bonitas que tienen mira que ser mi preferida una versión. Esta canción siempre me ha hecho sentirme jodidamente mal:

Caminante ante un Mar de Niebla (Friedrich, 1818)

 PD    Parte de la información de la presente entrada, sobre todo la referente al Bergfilm y Arnold Fanck, así como las capturas e imágenes sobre dichos filmes, han sido sacadas de las siguientes webs o blogs: GUIONISTASVLC, Montaña de Ficción y Montaña y tradición. Mi más sinceras gracias.